¡no voy a esperar que el destino hable por mi y lo dire!

¡no voy a esperar que el destino hable por mi y lo diré! tu eres la cura del mundo.
una revelación paralizante, una luz cegadora, el relámpago que sale de una negra nube, y yo solo soy las gotas que anunciamos tu llegar.
tu eres la revolución, y la revolución del amor, eres un grito fiero al aire y un tarareo matinal, eres el volcán erupcionando y la elegante figura de su pluma, eres la tormenta sobre este y su potencia infinita, eres el mar mundial completo hasta la ultima costa de el, y yo soy un rió que llega a ti sediento de mar, sediento de libertar, sediento de tu inmensidad, de tu cuerpo y del cielo entero.

eres la fuerza de la expansión, la que mueve los limites mas allá y crea tiempo y vida como el universo, eres mas allá de todo, estas en un lugar que no alcanza en la imaginación, estas perdida entre todo y yo solo soy uno que supo de ti, uno que logro enterarse de que existías, de que estabas cerca y a mi alcance, un genio incomprendido que puedo besar, una nueva belleza en la ciudad, una flor en el desierto, un árbol en la roca, el cóndor en el cielo, el puma en el monte, la araucaria madre de mi fortaleza natural, eres la dueña de mis tierras y nutres la vida en ella, eres el agua de sus ríos y tu alma es el lago que no bota una sola lagrima de pena.

Nayadeth.

eres los caminos,  y yo no dejare un solo camino sin andar.